Kalanchoe

Todas las plantas son realmente importantes para la vida del ser humano, no obstante, muchas resultan realmente hermosas para todo tipo de lugares. A esta se le llaman plantas ornamentales y son sumamente bonitas, pues tienen un valor estético que resalta en todos los ámbitos, logrando adecuarse a muchos espacios en los que resaltan y hacen que todo se vea mejor. En esta oportunidad mencionaremos a las Kalanchoe.

¿Qué son las Kalanchoe?

Contenidos

Es un género que pertenece a una familia de plantas bastante extensa. No obstante, este género en específico alberga en su interior una cantidad asombrosa de plantas que deben considerarse, pues resultan realmente preciosas, cada una de ellas. Se estima que en el género Kalanchoe existen, al menos, 125 especies. Es decir, que posee la densidad de población más elevada y cumple un papel fundamental en la familia en cuestión.

Son muy diferentes a las otras que existen dentro de esta misma familia, esto se debe a que hay una variedad mucho más pronunciada que en otros géneros y es mucho más probable que existan diferencias realmente marcadas. No obstante, es necesario agregar que cada una de estas especies tienen algo en común con las que se encuentran en el mismo género e incluso, en la misma familia. Por algo están clasificadas de ese modo.

La clasificación de las plantas funciona de maravilla en estos casos debido a que funciona para agrupar a diferentes especies en un solo género, y a todos los géneros que albergan las especies en una sola familia. Es precisamente lo que ocurre con las Kalanchoe. Se debe agregar que dentro de las especies se clasifican de forma más detalladas para poder distinguirlas las una de las otras. Es un tema de relevancia.

Todo acerca del género Kalanchoe

La historia del género Kalanchoe resulta bastante peculiar, especialmente porque posee un origen diferente al de los demás y las especies que se encuentran en su interior, formando parte de esta especie de jerarquía de la naturaleza, son igual de importantes y llamativas. Lo primero que hay que destacar es que algunas de las especies que se encuentran clasificadas en este género pertenecen al Viejo Mundo.

Cuando hacemos una referencia directa al Viejo Mundo, destacamos detalles sumamente importantes. En este caso es el tema de los países y continentes más antiguos conocidos en la historia de la humanidad. Estos son Asia, Europa y Asia, que son considerados así porque eran conocidos antes que los demás en épocas remotas en los que las personas ignoraban al resto del mundo. El territorio desconocido.

Es aquí donde se originaron las primeras plantas de este género, por lo que albergan una historia asombrosa, además de una resistencia increíble contra el tiempo. Para esto tuvieron que evolucionar, al igual que lo hicieron los seres humanos. No obstante, aquí también existen plantas del Nuevo Mundo, que es como se le ha denominado al continente americano después de la colonización. Un tema asombroso.

¿Cómo lucen estas plantas?

Al ser un número de especies tan elevadas es imposible tener un patrón fijo en su anatomía. No obstante, la Crassulacea Kalanchoe coinciden en muchos puntos a los que se deben mencionar para poder distinguirlas de las que pertenecen a otros géneros.

Muchas son arbustos, algunas son herbáceas perennes, pero hay una coincidencia en este aspecto debido a que todas crecen al ras del suelo y ninguna tiene la capacidad de ascender mucho.

Es decir, como patrón de este género hay que aplicar el hecho de que estas plantas en sí no pueden superar el nivel del suelo, aunque sus flores sí pueden lograrlo. Existen algunas, originarias de diferentes lugares del continente africano cuya su evolución se estancó y pueden crecer mucho más de lo común, hasta 15 cm de altura. No obstante, esto es completamente inusual en una planta de este género en específico.

Las hojas si son una variante casi fija en cada una de estas plantas, pues las formas nunca llegan a coincidir, aunque los colores no varían de manera constante. La mayoría posee un verde muy claro o muy oscuro, pero al fin y al cabo son de un color fijo. Algunas pueden tener colores con tonalidades diferentes en los bordes, pero casi nunca cambia el color verde debido a que la pigmentación de estas plantas tienden a conservarlo.

Coincidencias entre las especies

Es casi imposible que las plantas que pertenecen al género de las Crassulaceas Kalanchoe no coincidan en muchos rasgos, tanto físicos, como en términos de funcionamiento. Recordemos que todo lo que pertenece a la naturaleza tiene similitudes, pues los cuidados resultan bastante parecidos y viven de una forma realmente pareja. No obstante, en ellas lo que más resulta familiar, es el tema de las flores.

Kalanchoe

Cada una de las plantas que pertenecen a este género tienen la capacidad de florecer en una sola época del año, que es, desde los comienzos del invierno, hasta los comienzos de la primavera. Claro, esto depende de las condiciones en las que se encuentren, pues necesitan gozar de un hábitat adecuado para poder adquirir la salud necesaria y la capacidad para que logra producir las flores formalmente. Es un dato relevante.

¿Cómo se deben cuidar?

Los cuidados de las Crasulaceas Kalanchoe son asombrosos, cada uno es mucho más fácil que el otro. Lo cierto es que logran estar de acuerdo en algo: la temperatura, la forma de riego y la luz. Todas las plantas necesitan la administración de estos tres factores de forma constante para poder vivir adecuadamente.

No obstante, la diferencia de esta entre muchas otras es que no necesita de una atención realmente especial en el riego o la temperatura.

La mayoría de las plantas que se encuentran en este género son capaces de adaptarse con facilidad a todo tipo de situaciones, incluso las más difíciles en términos de temperatura. Pueden sobrevivir sin un riego constante y, de hecho, esto es lo adecuado. No se le puede administrar demasiada agua porque podría marchitarse.

Sin embargo, la luz es algo de gran relevancia si se desea que la Crassulacea Kalanchoe pueda crecer completamente sana y hermosa.

 

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